Ir al contenido principal

Microrrelatos del Vivir Constructivo: HÉROE AL RESCATE


Si eres un espectador asiduo de las series de TV, de películas, un adicto a los videojuegos o un lector apasionado de novelas, tal vez llegues a creer que en cualquier momento de tu vida puede ocurrir algo extraordinario, sorprendente, que cambie el curso de los acontecimientos y te revele de manera dramática tu propio destino:

Un héroe al rescate, un príncipe azul, un golpe de fortuna, el reconocimiento universal de tus talentos ocultos…

Lo cierto es que las probabilidades son escasas. Día tras día, nos encontramos con la misma rutina; el tedio nos invade y corremos a refugiarnos en nuestras fantasías personales: el héroe soñado, el príncipe azul, la fortuna, la aclamación de nuestro talento oculto…

De este modo, perdemos de vista las maravillas que encierra lo cotidiano, lo trivial, lo ordinario. Sólo acertamos a apreciar el valor de lo pequeño cuando lo perdemos: el trabajo era rutinario, pero nos proporcionaba un dinero; los vecinos, unos pesados, pero nos echaban una mano cuando era necesario; nuestra jornada diaria era monótona, pero su monotonía nos daba estabilidad.

¿Qué hacer, entonces, para no sucumbir a la rutina?

Aprender a ver más allá de lo evidente. Encontrar el sentido en lo cotidiano.

Un momento de inspiración no va a surgir de la nada. La inspiración es más probable que surja en medio de la ejecución de nuestras tareas cotidianas.

El héroe no va a llegar al rescate. El príncipe azul no te va a ofrecer un amor incondicional, la aclamación de los demás seguirá tan muda como siempre y nuestros talentos ocultos, ocultos permanecerán mientras no hagamos algo por ponerlos al día.

No; nuestra hazaña, más bien, puede consistir en que acudamos nosotros al rescate de quien lo precise, en que brindemos nuestros amor a aquellos con quienes compartimos una misma historia juntos, en que reconozcamos lo positivo de aquellos que se han molestado en hacer alguna cosa útil y en que busquemos mejorarnos un poco cada día.

En cuanto al golpe de fortuna… ¿No es una fortuna y un privilegio la posibilidad de construir algo positivo con nuestro comportamiento y nuestro tiempo en lugar de dejar que se nos escurra entre las manos?

Comentarios

Entradas populares de este blog

CÍRCULOS VICIOSOS DE LA INACCIÓN

  Mira este diagrama. Es mi felicitación de Navidad. Es una reflexión sobre bloqueos mentales y renuncias a llevar a cabo tareas y proyectos. Hay muchas cosas que no sé hacer.  Pero estoy aprendido a hacer algunas. Hay faenas que me llevan mucho tiempo. Otras no acaban de salirme bien y tengo que repetirlas.  Algunas me desesperan. A veces, me dan ganas de dejarlo todo y dedicarme sólo a lo que ya sé hacer. Pero eso sería limitar mi creatividad a un puñado de actividades. Entonces, recuerdo cuando era niño y no sabía atarme los zapatos. O cuando, al escribir, confundía la b con la d y la p con la q, o hacía el 5 con la barriga al revés. Con el tiempo, aprendí a hacer nudos marineros y también conseguí escribir algunas cosas publicables.  Por eso, cuando me enfrento a algo que no acaba de salirme bien, me acuerdo del diagrama del CÍRCULO VICIOSO DE LA INACCIÓN y me esfuerzo en romperlo. Ya se sabe: al principio, uno no sabe que no sabe; es la INCOMPETENCIA INCONSCIENT...

LA MOCHILA DEL PENSADOR (Cuento filosófico de Año Nuevo)

  ¿Quién eres? ¿Quién soy? ¿Quiénes somos? Sí. Todos tenemos nuestra identificación legal, estamos censados en alguna parte, Hacienda controla nuestras cuentas y "la nube" parece saber otras muchas cosas de nosotros; de nuestras correrías, nuestras peripecias y nuestras andanzas.  ¡Pues parece que estamos perfectamente identificados! Pero bueno, todos esos datos (nombre, domicilio, profesión, ingresos, filias, fobias, aficiones, planes, deseos, recuerdos, etc.) no son "nosotros". Ni siquiera el Dr. Frankenstein ensamblando todo ese entramado de detalles y vivencias conseguiría articular el "YO" que, esencialmente, somos. Porque todas esas cosas -y muchas más- sólo son nuestra tarjeta de visita, la fachada con la que nos presentamos a los demás (¡y hasta a nosotros mismos!). Pero no son la "esencia" de nuestro "YO". Pues, a lo mejor, eso es porque, en realidad no hay tal cosa como una "esencia del YO". O, tal vez, lo que ocurre...

🌕 La luna, el dedo y el espejismo de la felicidad

  Hay una antigua sentencia que ha viajado a través del tiempo y las culturas, y que sigue muy presente —y muy poco atendida— en la marea de publicaciones sobre “la búsqueda de la felicidad”. El sabio señala la luna, pero el necio se queda mirando el dedo. Una frase sencilla, de apariencia casi inocente, pero que encierra una advertencia tan oportuna como necesaria en nuestra época: no confundir el medio con el fin, lo accesorio con lo esencial, el camino con el destino . 📚 La galaxia del bienestar… ¿o del entretenimiento? En el vasto universo del desarrollo personal —libros, cursos, gurús, métodos, talleres— esta advertencia cobra especial relevancia. Nunca como ahora se ha hablado tanto de felicidad , autorrealización , paz interior o autenticidad . Y sin embargo, pocas veces hemos estado tan perdidos , tan dispersos o tan sedientos de algo que no logramos encontrar . Estamos rodeados de técnicas: Ejercicios de respiración Meditaciones guiadas Afirmaciones positi...